La alimentación, o más bien su administración, puede ser fuente de diálogo y comunicación entre el animal y el propietario , yendo a crear o mejorar la relación entre ambos.
Las razones que siempre han empujado al hombre a criar perros y gatos son sin duda, además de los fines utilitarios, la compañía y la dedicación desinteresada que estos animales son capaces de ofrecer.
Una convivencia serena con un perro o un gato no es fruto de la improvisación , sino que debe gestionarse con conciencia y conocimientos específicos.
Las mayores dificultades las representa saber comunicarse con el animal , entendiendo por ello tanto comprender sus actitudes como hacerle comprender nuestras intenciones.
La administración de la comida puede ser una buena oportunidad para iniciar o continuar el diálogo con tu mascota , no es arriesgado definirlo como uno de los medios de comunicación más válidos a nuestro alcance, además claramente del objetivo principal de mantenerlo en buena salud y en la medida de lo posible el animal el mayor tiempo posible.
Por lo tanto, no es arriesgado definirlo como uno de los medios de comunicación más válidos que tenemos con respecto a esta y otras especies animales .
Finalmente, no deben olvidarse las posibles repercusiones positivas para el hombre mismo: la administración de alimentos puede representar una herramienta útil para empoderar a los niños y una ocupación gratificante para los ancianos ; para todos puede ser un momento importante de educación alimentaria, ya que las reglas básicas son válidas tanto en el ámbito humano como en el animal.